21 de julio de 2014

Cada persona brilla con luz propia entre todas las demas.
No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos
y fuegos de todos los colores.
Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento,
y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas.
Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman;
pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede
mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende.